El verano es la época del año en la que más aumentan los niveles de consumo, es por ello que muchas de las personas que quieren dejar de su adicción pueden encontrarse con un fuerte impulso por consumir, ya que la cantidad de estímulos externos (las altas temperaturas, el aumento de actividades de ocio y tiempo libre, el deseo de deshinibición… etc.) son algunos de los facilitadores con los que habría que lidiar y que serían fuertes potenciadores de lo que conocemos como Craving.
El craving es el deseo intenso por consumir la sustancia habitual y generadora del trastorno adictivo y, que podría conducir al paciente a abandonar la abstinencia. Por ello, durante estas semanas os iremos informando de aspectos importantes a tener en cuenta como por ejemplo:
- Reconocer y comprender nuestros propios cravings y elegir la mejor estrategia para manejarlos.
- El deseo irresistible va creciendo hasta que se materializa en una acción que supone un alivio de tensión. Aunque la intensidad del refuerzo, es decir el consumo, es inmediata y la gratificación intensa, sin embargo, es importante que no olvidemos las consecuencias gratificantes tienen una vida corta.
- El deseo y el anhelo, una vez gratificados, son inmediatamente suplidos por sentimientos de culpa y depresión.
- Es importante tener en cuenta que el craving, no tiene porque ir seguido de un consumo de drogas. Si en la historia pasada, ha ido unido a un consumo, ahora es fundamental reconocerlo y responder de manera diferente.
Analiza estos ítems y si te sientes identificado con ellos no dudes en pedir ayuda.
Método Vincii
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