Dentro de las cuatro emociones básicas que muchos autores señalan, el miedo es una de las más potentes. Tiene el poder de activar y paralizar a cualquier ser vivo.
En la naturaleza podemos encontrar multitud de mecanismo de defensa desarrollados para combatir el miedo y la autodefensa cuando éste aparece, habiendo previamente interpretado el sujeto una situación de alerta, alarma y/o peligro.
El miedo es capaz de llevarnos a la quietud más rígida que pueda existir, puede hacernos entrar en un bloque mental y físico que nos coarte el movimiento y, por tanto, la posibilidad de actuar. En la parálisis perdemos oportunidades, momentos, experiencias y vida. Mucha vida.
En la acción, generada por la propia naturaleza para mantener nuestra supervivencia, ganamos posibilidad de cambio, de mejora y por tanto, de bienestar.
Es por todo ésto por lo que esta emoción se convierte en una de las más potentes y que mayor trabajo terapéutico requiere, así que no dejes de trabajar en esta emoción y si sientes que en tu caso el miedo te tiene paralizado y necesitas volver a la acción, no dudes en llamarnos.
Método Vincii
674-276-701